Lo que llevo dentro tiene sabor a menta.

5 comentarios






Muchas veces me pregunto de dónde saco toda mi imaginación, y solo hallo una respuesta posible. Durante mi niñez mi padre nos solía contar cada noche cuentos inventados antes de dormir. Tenía la facilidad de sorprendernos con una historia aún más increíble a la anterior y siempre improvisadamente. La única condición era que eligiésemos tres personajes, entre los cuáles yo siempre elegía a "Pepito Grillo". Recuerdo como nos contaba cuentos con toda serie de detalles, incluso podíamos verlo, nos lo imaginabamos a la perfección. Era alucinante como conseguía producirnos distintas emociones, desde alegría hasta una tristeza momentánea. Si tubiese que definir la imaginación con un sabor, elegiría la menta, porque mi padre se lavaba los dientes justo antes de contarnos un nuevo cuento. Es una pena que me quedase con ganas de escuchar más cuentos... pero es así de repente se pasa la vida y te toca ser mayor.

¡Qué fácil era ser pequeña...!


Mi única respuesta, es que tanto la imaginación, como las bromas entre otros, los llevo en los genes, heredado de mi padre... Al igual que sé que el esfuerzo y la constancia por escribir cada vez mejor son valores adquiridos por mi madre. Algún día me gustaría hacer reír a mis hijos con un simple cuento improvisado. Intentaré enseñarles una serie de valores de forma divertida, haciéndoles soñar con lugares maravillosos y que se sientan felices por el simple hecho de que la historia acabe con un final feliz.



A lo largo de mi vida he pasado por muchas etapas, algunas fueron felices, otras en cambio complicadas... Nadie me dijo que la vida fuera fácil... de hecho el Ser Humano aprende a base de palos, cito: "Si la vida te da palos, hazte una cabaña". En ocasiones las cosas no salen como has ideado o ni siquiera habías pensado, pero tarde o temprano, el tiempo te enseña a ser fuerte, a salir adelante, sólo tienes que conseguir un motivo e intentar ver lados positivos.

Aún me queda mucho camino que recorrer, pero sinceramente espero acabar el cuento del que soy protagonista con otro final feliz.




Cristina García Montes.
Leer más »

¿Y tú conseguiste escapar del amor?

0 comentarios


Sí, es mi tercera entrada sobre el amor. S.O.S

 
¿Y quién me lo iba a decir a mí? Siempre me consideré una rebelde del amor, y ahora miradme. Me negué mil veces al amor y por arte de magia me sorprendió, te das cuenta que te tiene enamorada, que no hay marcha atrás, que apareció por sorpresa y estás sin escapatoria. Porque el amor no entiende de normas y menos de lógicas. Y es cuando sientes que te sobran palabras y al mismo tiempo te faltan. Que no quieres alejarte, ni que se aleje. Que lloras por dentro hasta que rebosas. Y aparecen esos días en los que mueres al verlo y no tenerlo y al mismo tiempo son los mejores días de tu vida. Pero sin duda alguna lo más duro es cuando te arde el alma por querer y no poder gritárselo. A pesar de que te entristece, te consuela a la misma vez (más vale tenerlo cerca que lejos). Para el colmo a todo esto sé que esto me ocurrió desde la primera vez y por segunda vez. Y sí, a mí también me pasa que mi mente puede más que mi corazón.  

Una vez más no sé qué decir porque siento que ya está dicho todo. Ante alguna duda, el amor no tiene explicaciones.



(*) Me gustaría saber tu opinión sobre la entrada. Más abajo puedes pinchar en la casilla que más consideres apropiada y comentarla, gracias.
Leer más »

Suspiros irremediables.

0 comentarios
Suspiros. Suspiros sufridos. Suspiros incontrolables e irremediables. ¡Cuánto duele amar en silencio! Sabes que es imposible, y a pesar de ello piensas que "Nada es imposible", y ahi sigues maltratandote, día tras día. Te engañas. Un paseo. Una mirada. La frase exacta en el momento apropiado. Y ahí estas tú, inocente niña, pensando que llegó el momento, que hoy será diferente. Y otra vez, te equivocas. ¿Quién sino es él? Te enamora sin quererlo. Te confundes. Lo ves todos los días, hasta donde no deberías verlo. Sueñas siendo reclusa de la ilusión. ¿Decirselo? Y sino... y si... Llegas a amargarte. ¿Qué hago? Entre todas esas cuestiones, sigues ahí, su amiga, su querida amiga. Maldito estancamiento en la fase amigos, sobre todo cuando confundes sentimientos. Amistad y amor, esos grandes rivales que tanto se odian. "Del amor al odio hay un paso", sigo esperando saber cuántos pasos hay de la amistad al amor. ¿Qué clase de reacción química sufrí yo? Maldito antídoto que sólo me hace sufrir en silencio. Suspiro. No quiero sentir lo que siento, "Querer es poder" en este caso no lo es. Un anhelo. ¿Porqué anhelo algo que nunca he tenido? Conversaciones. Cortas o largas. Para tí son importantes, almenos tu corazón te da señales de vida desde ahí dentro. "Se te sale el corazón por la boca" Pues anda que si se me saliera, pondría fin a mis problemas de amor. No puedes elegir entre tu corazón y tu mente. Tu corazón te dicta, tu mente lo atrofia. Hay veces en que usar la razón es lo menos lógico, porque el amor está en el corazón y no en la mente. Le amo y me arrepiento (típica pelea de sentimientos). Vale, le amo. ¿Y ahora qué? Esto es "un amor idiota, yo por él, y él por otra", por tanto me arrepiento. Y suspiras. Esos suspiros irremediables. Sabores, todos diferentes. El amor tiene dos sabores, el amargo y el dulce. ¡Qué amargo es el amor en silencio! Vuelvo a suspirar. Sin duda, confunsa. Suspiro. Espero que alguien encuentre el remedio al infarto de amor, porque siento que me queda poco...


(*) Me gustaría saber su opinión sobre la entrada, rellene un poco más abajo una pequeña encuesta y publique un comentario en la entrada. Muchas gracias.
Leer más »
 
Blog protegido con © Copyright. Con la tecnología de Blogger.

¡VOTA! Valora el blog

Colabora

Podeis comentar las entradas, sino teneis una cuenta Google podeis recurrir a la forma anónima, un saludo.

Seguidores

Visitas del Blog

Translate

Encuentrame en:


"Siempre habrá un perro perdido en alguna parte del mundo que me impida ser feliz".

© 2010 Cristina García Montes Design by Dzignine
In Collaboration with Edde SandsPingLebanese Girls